Paseo por la playa aunque llueve, arrastrando los pies, notando como la lluvia y el mar se hacen uno y ambos resbalan por mi ser, acariciando mi piel, humedeciendo mis poros y haciéndome sentir especial... Mi chaleco azul con capucha cubre mi cabeza y mis auriculares, escuchando U2 y recordándote, me da igual q me vea la gente porque la q no se ve soy yo.
La lluvia aprieta y corro mojándome más deprisa, la cara empapada por el agua y las lágrimas... No te consigo sacar de mi cabeza, tampoco quiero aunque me lamento por tormentarme de nuevo.
Saliste de mi vida, ¿porqué entras de nuevo? Te olvidé y ahora sufro de nuevo, vuelve a ser un secreto...
No me hagas daño porque intento pasar de todo esto, intento ser fría y calculadora pero tu sonrisa y tus susurros nocturnos me complican q pueda pasar página como me gustaría.
Corro imaginando la última vez q me acariciaste y te quedaste a dormir, si otra tiene tu corazón ¿qué tengo yo?
Tanta agua me nubla la vista y la razón, me tropiezo contigo, cayendo en la arena mojada donde me abrazas y me preguntas "¿estas bien?"
Hueles bien, muy bien; mis manos apoyadas en tu pecho me incorporan, te miro, pero no te veo; creía q eras tu... Ha sido otro quién me ha recogido cuando he caído. Lo miro sonriendo avergonzada pero no pasa nada, su mirada es sincera, buena, dulce y sensata... No me ama, pero quiero q lo haga...
Por primera vez mi corazón late deprisa y me he olvidado de tu risa, esto no es lo q esperaba pero me siento afortunada. Alguien allá arriba se ha compadecido de mí, devolviendo mi alma a mi ser con este chico q me ha recogido.
Cogiendo mi mano corriendo nos vamos, implícita está la pregunta de lo q yo hacia llorando en el mar, no respondo, sólo me apoyo en tu palma mientras secas mi cara.
Me abrazas fuerte, se q necesito entrar en calor pero me das demasiado.
Nos quedamos sentados allí, hablando de todo y de nada, no te cuento lo desgraciada q él me hace sentir, se q tu me harás feliz y sonreír.
Te explico como soy yo, lo complicada q puedo ser pero entrelíneas te digo lo feliz q te haré.
Quieres arriesgar, quieres jugar te lo veo en la mirada, en la comisura de tu boca con esos labios q llaman al pecado. Me explicas como eres, hacemos tiempo demostrando q hace un momento nos daba igual mojarnos y ahora esperamos a q pare para irnos de nuevo, pero no solos, tampoco juntos; con una nueva ilusión y sentimientos de querer estar y vivir de nuevo la aventura del amor.
Así soy yo, y te gustaré, lo sé...
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