Hoy os dejo un post con mi opinión sobre el último libro que he leído.
He leído mucho sobre Megan Maxwell, la saga sobre Pídeme lo que quieras, que como he dicho en anteriores ocasiones hubiera estado mejor siendo solo trilogía y por eso no leí el cuarto. No había que mejorar la historia, ya era buena así.
También he leído Melocotón Loco, mi favorita, y no tiene nada, pero ese bombero me gustó mucho; a veces una lectura es más de lo mismo y te encuentras con que no es así, o en la época en la que la lees no es así y necesitas esa historia para volver a creer.
Siendo autora busco ratitos de lectura, me quito horas de sueño para poder hacerlo, pero cuando me recomendaron esta nueva historia no lo dudé, sería mi compañera en las horas de fisioterapia.
La compré en digital, y me puse a ello...
Normalmente van con retraso en el fisio, así que yo iba 15min antes, más lo que se retrasaba... En fin, leía un capítulo.
Esperaba una historia "más de lo mismo" y encontré una historia diferente.
¿Dos personas del sexo opuesto pueden ser amigos sin derecho a nada?
¿Puede la vida dar tantas vueltas como para encontrarnos con algo del pasado ya borrado?
¿Está el amor predestinado?
¿Nuestra vida está escrita?
Muchos sentimientos, contradicciones y finalmente me recordó a la película "Philadelphia" Con Tom Hanks y Antonio Banderas entre otros.
La historia engancha, en algunos aspectos larga, pero merece la pena leerla.
Ya sabéis que soy una llorona y aunque me guste leer esta clase de novelas yo hubiese metido más mi toque.
A veces tengo la sensación de que nos estamos quedando sin ideas, de que queremos agradar al lector sin preocuparnos por si a nosotras como autora nos gusta o queremos que acabe así.
Que una historia sea bonita o romántica no requiere que tenga final feliz, ¿o si?
Con esta pregunta que dejo en el aire me despido por hoy, espero vuestras respuestas.
Recordad, mañana más y mejor...
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